traducción por Carlos Andrés Delgado Velez
Clap . . . clap . . . clap-clap-clap
clap . . . clap . . . clap-clap-clap“
El sonido de las manos se dispersa a través del bosque húmedo tropical de Colombia, creciendo en volumen, rebotando en troncos de árboles y hojas,
“clap . . . clap . . . clap-clap-clap”
El aplauso es más y más fuerte, hasta que el estribillo alcanza su máxima intensidad, momento en el cual aparece una llamada: “UNO. . . DOS. . . TRES. . . ¡TREPADORES! ” 23 voces gritando al unísono.
Así comienza un día para el decididamente atípico curso Descubriendo el Dosel 2019 (Discovering the Canopy 2019), nuestro entrenamiento para trepadores más ambicioso que hasta ahora hemos tenido. En un estallido de aplausos, 19 estudiantes y cuatro instructores se adentran en el bosque, con cascos en la cabeza y cuerdas en las manos, en busca de árboles para escalar y nuevas habilidades para aprender y dominar.
Durante una calurosa y soleada semana en la Reserva Natural Río Claro en Colombia, tenemos un gran objetivo por delante de nosotros: convertir a 19 biólogos de América Latina – todos siendo trepadores novatos – en trepadores de árboles competentes y seguros, listos para regresar a casa y ascender sus propios bosques con el fin de desarrollar investigaciones destinadas a la conservación que nadie más está haciendo. Es parte de nuestra misión brindar acceso al dosel (y realizar conservación del dosel) al mundo, un trepador y un país a la vez.
El entrenamiento del trepador es una cosa hermosa. Cada árbol es un enigma para resolver, además cada técnica y equipo es nuevo. A los hombres y mujeres que pasan sus vidas caminando por el suelo y que normalmente consideran que las alturas son algo peligroso, ahora se les pide que cuelguen sus vidas a cuerdas que tienen el diámetro de una moneda de diez centavos estadounidenses. Debajo de cada árbol, dos biólogos luciendo cascos de Petzl de color amarillo brillante, dan aliento y consejos a sus colegas que avanzan nerviosos hacia arriba, hacia abajo y alrededor de exuberantes árboles tropicales. Los instructores en cuerdas Yale vigilan los detalles técnicos, poniendo énfasis, cada segundo, en la seguridad de todos. Al abrir las mentes de los estudiantes y llevarlos a resolver problemas por sí mismos, estarán preparados para los desafíos futuros cuando ya nadie estará allí para explicar qué hacer o para verificar su seguridad.
Estamos aquí para enseñar y aprender. Todos los días se muestran nuevos equipos, se explican sus usos correctos e incorrectos. ¿Cómo armar un sistema de escalada para subir una cuerda de manera eficiente y segura? ¿Dónde coloca las cuerdas en su arnés cuando está escalando o cuando está asegurando su posición en troncos o ramas? Las manos, los brazos y las piernas repiten nuevos movimientos tantas veces que ya comienzan a desarrollarse la memoria muscular, la cual no existía hasta la semana pasada, por ende, un movimiento que se sentía antinatural y torpe en el primer día empieza a suceder instintivamente después de cinco días de entrenamiento. Y siempre están presentes los árboles ¿Cómo pones una cuerda para trepar 30 metros en un árbol mientras estás parado en el suelo? ¿Cómo te mueves a lo largo de todo el ancho de un árbol mientras estás suspendido de una cuerda? ¿Cómo podrías ir a lo largo de una rama y posicionarte para poder instalar una trampa de cámara sin balancearte en la posición inadecuada? Estos son ejemplos de algunos casos y desafíos tratados en este curso.
Sin embargo, trabajamos en algo más fundamental que saber cómo funciona el equipo de trepa y la memoria muscular de los trepadores: trabajamos en el corazón. Los nuevos trepadores nos confían sus vidas cada día. “Camina en esa rama 6 metros. Confía en mí “. Y, lo que es más importante, vamos construyendo confianza el uno con el otro y con ellos mismos, minuto a minuto, hora a hora, y para cuando nosotros nos vayamos. “Impulsa tu cuerpo de este árbol a ese otro y quédate allí. Confía en tí mismo”. Conquistar el miedo con confianza crea confianza en sí mismo y cambia vidas. Hace que tomes el viejo tú y se forme alguien más fuerte y más sabio, que puede hacer un mayor y mejor trabajo. ¿Qué son los aplausos que llama a todos los escaladores a la base antes y después de cada ejercicio? Esta práctica no es accidental. Por el contrario, permite transmitir el rol de autoridad, y de confianza, de las manos de los instructores, y lo pone directamente en las manos de los estudiantes. Sencillamente, reúne a estudiantes e instructores y forma una familia.
Si hay una lección destacada de esta gran experiencia es esta: Soñar en Grande. La idea detrás de Descubriendo el Dosel 2019 era grande y ambiciosa, improbable, si no imposible. Buscabamos nada menos que entregar el manejo de la ciencia de la conservación a los biólogos locales que viven, respiran, trabajan y sustentan sus familias en bosques en peligro. Si sueñas en grande y apuntas a las estrellas, lo imposible está a tu alcance.
De ahí sigue Leccion # 2 y es la que sigue: cuando quieras soñar en grande, invita a tus amigos. Esta capacitación fue un éxito debido a amigos y socios que fueron absolutamente críticos en este esfuerzo. En primer lugar, la Fundación Alianza Natural (LINK), una organización colombiana sin ánimo de lucro y dedicada a la conservación de la biodiversidad, fue el anfitrión oficial de este evento e hizo toda la organización y preparación en el país. La Fundación Petzl (LINK) llegó temprano como nuestro patrocinador de equipo oficial, donando cascos, arneses, mosquetones, atolladores y una larga lista de equipos vitales para este entrenamiento. Yale Cordage (LINK) fue otro patrocinador oficial del evento, pues donó kilómetros de cuerda, literalmente.
SUR Company (LINK), encabezada por Javier Urueña en Bogotá, y Orozco y Cia. (LINK), encabezado por Hernando Orozco en Medellín, hizo posible enviar todo ese equipo costoso a Colombia. The Peregrine Fund (LINK) es una organización estadounidense sin ánimo de lucro, dedicada a la conservación, que cree tan firmemente en el cambio de vidas y en la creación de capacidad local que patrocinó mi tiempo y muchas de las propuestas de financiación del proyecto. La gente increíble de la Reserva Natural Río Claro (LINK) hizo descuento a nuestra alimentación y alojamiento, y la belleza del lugar produjo un sabor exquisito al éxito del curso. La buena voluntad de tantas personas fue una avalancha. Recibimos muchas donaciones valiosas de Nick Bonner en TreeStuff, SherrillTree, NuGreen Store, Kevin Bingham en Singing Tree, DMM Wales, WesSpur Tree, lo que hizo permitió traer árboles a los científicos y puso a los científicos en los árboles. Y por último, pero no menos importante, se necesita dinero para ofrecer un evento como este. La Fundación Rufford (LINK) confió en nosotros y creyó en nuestra misión. A cada uno de ustedes, un aplauso muy especial de nuestra familia: CLAP . . . CLAP . . . CLAP-CLAP-CLAP.
Un trepador, un árbol, un bosque, un planeta a la vez. Esta es la altura a la que ascendimos. GRACIAS.
Para obtener más información sobre Descubriendo el Dosel 2019, consulte el hashtag #descubriendoeldosel en las redes sociales o visite la página de Flickr del evento (Flickr page).
¿Quieres ayudarnos a cambiar vidas la próxima vez? Ve a la página web de Canopy Watch (Canopy Watch) y contáctanos. Siempre podemos ser más amigos y compañeros.
Necesito dar las gracias y lo haré en las fotos ya que las palabras no son suficientes para reconocer a algunas personas especiales.
Sólo unas fotos de nuestros alumnos especiales. Ellos son la razón.